CASOS. Raúl Rodríguez, Carlos Fernández, Rolando Alarcón y Raúl Peláez pasaron por diversos grupos políticos. Dicen no ser tránsfugas.
Han pasado por más de una fuerza política e independiente. Dicen haber estado en calidad de invitados y que por ello no pueden llamarlos tránsfugas. Lo cierto es que la ciudadanía no ve con buenos ojos esos cambios reiterados de camiseta política, más aún en plena campaña electoral como la que está en marcha.
A menos de tres meses de los comicios municipales y regionales del próximo 5 de octubre, La República le da una mirada a aquellos candidatos que han pasado por diversos grupos políticos e independientes. Juzgue, usted, amigo lector.
Es el caso de Raúl Rodríguez Marcelo, quien empezó su carrera política en el partido Alianza Para el Progreso (APP), luego pasó a Fuerza Nacional (FN) del general PNP (r) Antonio Ketín Vidal, después por Gana Perú y ahora está en Vamos Perú, tratando de ganar la alcaldía provincial de Trujillo.
Incluso en el 2013 tuvo un paso accidentado por el Partido Popular Cristiano (PPC), donde pese a haber sido invitado por la lideresa Lourdes Flores Nano, tuvo que salir al no haber tenido el apoyo de los dirigentes regionales para tentar este año 2014 el sillón de Trujillo.
En su defensa, Rodríguez afirma que no es un tránsfuga y que ha estado como invitado en grupos políticos como el PPC. “De APP me fui porque no había espacios para desarrollarme”, dice.
ACEPTA CRÍTICAS
Otro de los políticos trujillanos que ha transitado por más de una agrupación política es Carlos Fernández Verde. Comenzó en el año 2004 en el PPC, donde fue secretario regional, en el 2006 postuló a la presidencia regional de La Libertad (en alianza con otros partidos) y en el 2010 a la alcaldía de Trujillo. Un año después postuló al Congreso por la alianza entre PPK, APP, PPC y Restauración Nacional (RN). En todos los casos sin éxito.
En plena segunda vuelta electoral de la elección presidencial del 2011 se retiró del PPC y anunció su apoyo al candidato nacionalista Ollanta Humala.
Luego poco se conocía de Fernández Verde, hasta que el año pasado se supo de su apoyo al aquel entonces candidato del Partido Aprista Peruano (PAP) a Trujillo, Daniel Salaverry Villa. Incluso se supo que iba a ir en su lista como primer regidor.
Tras la renuncia de Salaverry Villa al PAP, éste intentó formar su movimiento Democracia, Seguridad y Valores (DSV) –contando con el apoyo de Fernández Verde- pero no tuvo éxito.
Salaverry Villa aspira ahora a la alcaldía de Trujillo por Fuerza Popular de Keiko Fujimori y Fernández Verde va como primer concejal en esa nómina.
Fernández Verde también considera que no lo pueden llamar tránsfuga, aunque reconoce que tras su paso a Fuerza Popular será objeto de muchas críticas por parte de sus contrincantes políticos y algunos votantes.
“Llegué a apoyar a Gana Perú, no para inscribirme o militar (en esa confluencia). El transfuguismo es cuando luego de haber salido por un partido, se pasa a otro, por una dádiva o un interés económico”, acota.
Rolando Alarcón Arteaga, quien postula al sillón provincial por la alianza Súmate por una Nueva Libertad, postuló al parlamento en el 2006 por el grupo fujimorista Alianza Para el Futuro, en el 2011 lo hizo por Solidaridad Nacional y ahora está en esa coalición.
Raúl Peláez García, candidato en el distrito en La Esperanza, pasó por Somos Perú, Fuerza Democrática y hasta ahora está en Súmate por una Nueva Libertad. Es la sexta vez que aspira al sillón edil.
«Son tránsfugas asolapados»
El sociólogo y analista político Juan Gamarra Nieto, considera que los candidatos que cambian de camiseta política en cada proceso electoral son una especie de tránsfugas asolapados.
“Estos políticos no llegan a tener una doctrina definida. Cambian de camiseta política sin respetar principios, trayectoria política, pensamientos. Nada. Apelan a un pragmatismo bastante peligroso”, subraya.
Gamarra Nieto afirma además que si uno va como invitado a un partido político o movimiento independiente, es porque tiene coincidencias en cuanto a la doctrina.
“Yo no podría aceptar una invitación del fascismo si por lo menos no tengo un acercamiento con el fascismo”, puntualiza a manera de ejemplo el sociólogo y analista político. (Fuente: La República)