Al culminarse los trabajos de desratización, desinsectación y desinfección, solo en el mercado autogestionario La Hermelinda se recogieron 1,307 roedores muertos. Sin embargo, según especialistas a cargo de estas labores, un gran número debe haber muerto en sus madrigueras.
Al término de los trabajos de prevención contra la peste bubónica ejecutados por la Municipalidad Provincial de Trujillo (MPT), a través de su Subgerencia de Salud, y la Gerencia Regional de Salud del Gobierno Regional, en este centro de abastos fueron selladas 960 madrigueras de roedores con ‘diablo fuerte’, una mezcla de cemento con yeso, a la que se agregó vidrio molido para bloquear la salida de las ratas.
Después de poco más de tres meses de intenso trabajo con apoyo de comerciantes sensibilizados, se culminaron los trabajos de desratización, eliminación de pulgas y otros insectos, para prevenirse un brote de la peste bubónica en el lugar, toda vez que se verificó que en el complejo comercial la presencia de roedores infestados de la bacteria Yersinia Pestis, trasmisora de la enfermedad.
En el informe elaborado por el subgerente de Salud, Julio Torres Vigo, se dio cuenta del trabajo ejecutado a la gerente de Desarrollo Social de la MPT, Tania Baca Romero, quien inspeccionó los trabajos y pidió a los comerciantes mejorar la infraestructura y también que ejecuten el ordenamiento de la ubicación de puestos en los pasillo, respetando la áreas libres para el desplazamiento del público usuario.
Los trabajos contaron con apoyo del MINSA que brindó rodenticida anticoagulante monodósico, mientras que los materiales empleados fueron aportados por los propios comerciantes. La MPT también colaboró con parte del rodenticida y se recibió apoyo de Defensa Civil y de la Subgerencia de Comercio Informal y del SEGAT.
CONSTRUYEN PISOS DE CEMENTO PARA EVITAR MADRIGUERAS
Como resultado del sellado de cerca de mil madrigueras de roedores, los comerciantes se organizaron y por sectores construyeron pisos y pasadizos de cemento, para impedir que surjan nuevas madrigueras junto a sus puestos de venta, mejorando notablemente la salubridad.
Antes estos mismos comerciantes almacenaban sus productos alimenticios sobre el suelo de tierra y los compradores también tenían que caminar por pasadizos de tierra..
En el sector VI, de frutas, de 170 puestos de venta, 80 ya tienen pisos de cemento. En otros sectores como en el de papas se construyó una vía de acceso con pavimento de cemento y en el sector aves los comerciantes tendieron tubos PVC de 8” para alcantarillado y pisos de cemento en sus puestos de venta.