En esta segunda vuelta, debemos cerrarle el paso al peligro mayor para nuestra patria, de evitar que la corrupción combinada con el narcotráfico regrese al poder; expresó el abogado aprista Carlos Calderón Carvajal, integrante del Colectivo Ciudadano “Trujillo es decencia”.
No nos referimos solamente al fujimorismo de los años 90, con el narcoavión presidencial y los cárteles de droga manejados por Montesinos; sino que estamos hablando del fujimorismo actual, con los 100 kilos de droga encontrados en un local de propiedad de Kenji Fujimori, hermano de la candidata; con el Secretario General de su partido, el congresista Joaquín Ramírez, investigado por lavado de activos por la agencia anti drogas de los Estados Unidos (DEA); con su candidato a vicepresidente, José Climper, envuelto en un escándalo de manipulación de audios al estilo Montesinos, para evitar que su candidata Fujimori sea puesta en evidencia; enfatizó Calderón.
Está probado que los asaltos y asesinatos de jóvenes estudiantes para robarle su celular o su computadora, y la extrema violencia de las bandas delincuenciales contra ciudadanos indefensos, tienen relación con el consumo y tráfico ilegal de droga; razón por la cual debemos combatir al fujimorismo que es la organización política con mayor historial de sospecha y vínculos con esta lacra social; sentenció el abogado.
Nuestra obligación moral es evitar que en el Perú se instale un narco estado, por lo que exhortamos a los trujillanos y liberteños a votar por la alternativa que representa el candidato PPK, ya que el voto blanco o viciado favorece a la candidatura fujimorista; finalizó Carlos Calderón.
Como se recuerda, hace unas semanas, el colectivo ciudadano “Trujillo es decencia” realizó una marcha en contra de la candidatura de la señora Fujimori, pero sin anunciar el sentido de su voto; pero ahora los apristas que integran dicho colectivo han anunciado su decisión de apoyar a PPK, por ser la opción democrática frente al autoritarismo; como ellos mismos lo han manifestado.